Para poder entender la cultura y las tradiciones de los pueblos de la Safor es necesario conocer nuestra historia. Pocos lugares engloban nuestro pasado como el pequeño pueblo de Rutba (actual Rótova), situado a los pies de la Serra Grossa en su vertiente SE, donde todos sus barrancos confluyen a la cuenca del río Vernissa, principal afluente del río Serpis.
La situación geográfica del pueblo no es casual ya que se encuentra a caballo entre los valles de Albaida y la Safor, de aquí proviene su actual nombre que deriva del topónimo árabe Rutba que significa peaje, siendo este punto un lugar clave para controlar el paso entre los valles interiores a la costa en épocas de dominio musulmán. Esto nos da una idea de la importancia que tuvo esta alquería musulmana, aproximadamente desde el siglo IX hasta la pérdida de estas tierras en favor de los cristianos, a mediados del siglo XIII tras la famosa revuelta del Visir Al Azraq.
Pero todo empezó mucho antes en sus barrancos y cuevas. Los antiguos pobladores prehistóricos dejaron su huella en varias cavidades de esta zona donde la fauna y la flora era más abundante que la actual. Se han hallado restos artísticos de época neolítica, con una antigüedad de 8.000 años, correspondientes al Arte Rupestre Levantino y considerados Patrimonio de la Humanidad. También hay evidencias arqueológicas que confirman la presencia de Neandertales asentados en estas montañas, probablemente desde el Paleolítico Inferior, hace unos 250.000 años.
Con el paso del tiempo, distintos pueblos como Fenicios, Iberos, Romanos y Árabes han habitado esta región aportando su cultura, sus tradiciones, su lenguaje y sus avances, todas estas influencias han modelado la identidad actual de los habitantes de la Safor.
La ruta que proponemos transcurre por el PR-CV100 y nos llevará a recorrer los antiguos senderos llenos de tesoros de otros tiempos que nos hablan del pasado, del trabajo y aprovechamiento de las montañas, de las batallas que allí se han librado, del ingenio de estas gentes y sobre todo del vínculo que hemos tenido siempre con la naturaleza.
Aparte de la importancia histórica, el gran atractivo de esta ruta es la riqueza medioambiental. El clima, la orografía y la geología han condicionado en gran medida la abundancia de endemismos de flora en el territorio Diánico. En esta sierra en concreto se localizan 2 Microreservas de las 12 que tenemos en la comarca. Una es la Microreserva de Flora Casa dels Garcies que cuenta con un refugio privado y un sendero botánico y otra es la Microreserva de Fauna Cova de les Rates Penades, siendo una de las cuevas de murciélagos más importantes de España tanto por el número de ejemplares como por la variedad de especies, algunas de éstas en peligro de extinción.
A lo largo del recorrido podremos disfrutar de los siguientes puntos de interés:
Barranc Blanc y Font del Castell
Castell de Borró
Microrreserva de Flora, Casa dels Garcies
Forn de calç
Alt de les Àguiles
Barranc d’Atanasi y Font de les Galeries
Aqueducte
Microreserva de Fauna Cova Rates Penades
Penya Roja
Molí Racó de la Cova